Ellas dicen que, en pleno desierto, aprendieron a tener lagunas mentales; desde entonces no pasan sed y se divierten de lo lindo en ojos de agua y oasis re creados por el olvido. A veces, incluso, levantan buenas cosechas de pescado y llegan nadando por corrientes subterráneas hasta el mar.
Nadie me le contó ni lo leí, yo las conozco, estuve ahí.
Nenhum comentário:
Postar um comentário